¡Mañana volvemos a las entradas regulares! Madre mía, ya ha pasado un mes, no tengo pocas ganas de volver :-3
En el 2004, David Firth comenzó a publicar una serie de animaciones en flash con el nombre de Salad Fingers. Su protagonista era un ser humanoide verde, sin manos (normales), orejas ni oídos, con fuerte acento inglés que vivía en una especie de páramo postnuclear habitado por seres deformes. Sus “aventuras” no tienen un ritmo lógico, siguen un orden que concuerda más con un mal sueño o con la mente de un loco que con una serie de animación. Aviso, lo que viene es una obra extraña en el sentido estricto de la palabra y puede incluso dejar mal cuerpo tras verla.